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Published on 23 Jun 2017
Madrid,
23 jun (EFE).- (Imágenes: Leo Redondo) Uno de los "mayores iconos gay"
del Museo Thyssen-Bornemisza, "La muerte de Jacinto", de Giovanni
Batista Tiepolo, que retrata el trágico fin de la relación entre el dios
Apolo y el príncipe Jacinto, regresa a las salas de la colección tras
un año de restauración, coincidiendo con el WorldPride 2017.
El director artístico del museo, Guillermo Solana, ha resaltado hoy durante la presentación del cuadro que la limpieza de los barnices oxidados ha permitido recuperar la riqueza de los colores y las formas de esta pintura y le devuelve a Tiepolo su "estatus" junto a las "grandes obras" del museo.
El cuadro representa un episodio narrado en "Las metamorfosis", de Ovidio, en el que Apolo y su amante Jacinto, príncipe de Esparta, compiten en lanzamiento de disco hasta que el joven es herido de muerte en la cabeza por aquel, por su propia torpeza o por un mal lanzamiento del dios.
Tiepolo se basó en una traducción italiana del libro hecha por Giovanni Andrea Dell'Anguillara, en la que la competición es reemplazada por un partido de tenis y la muerte sucede por un golpe de pelota, lo que explica la aparición de varias de ellas en el suelo, una raqueta y una red caída al fondo.
La obra fue encargada por el barón Whilhelm Friedrich Schaumburg-Lippe, afincado en una localidad cercana a la ciudad alemana de Wurzburgo, en la que el artista trabajaba junto a sus hijos desde 1750.
Con ella, el noble quería rendir, probablemente, homenaje a un amante suyo, un joven músico español, fallecido en 1751.
En la sala 17 de museo se encuentra junto a la obra una pequeña exposición que incluye un vídeo sobre el proceso de restauración, así como dos dibujos preparatorios de la pintura prestados por la Staatsgalerie de Stuttgart.
También se pueden contemplar fotografías de los estudios técnicos que se le realizaron al cuadro y que permite observar a través de radiografía y reflectografía los cambios que el artista realizó durante el proceso de creación así como el boceto original de la pintura.
De esta manera, se da a conocer al visitante "lo que hay detrás de la pintura misma" con estos estudios, que no suelen hacerse públicos, dado que representan fuentes de estudio que los museos albergan de sus obras, ha señalado el restaurador jefe del Thyssen, Ubaldo Sedano.
TOTALES DEL DIRECTOR DEL ÁREA DE RESTAURACIÓN DEL MUSEO THYSSEN-BORNEMISZA, UBALDO SEDANO.
El director artístico del museo, Guillermo Solana, ha resaltado hoy durante la presentación del cuadro que la limpieza de los barnices oxidados ha permitido recuperar la riqueza de los colores y las formas de esta pintura y le devuelve a Tiepolo su "estatus" junto a las "grandes obras" del museo.
El cuadro representa un episodio narrado en "Las metamorfosis", de Ovidio, en el que Apolo y su amante Jacinto, príncipe de Esparta, compiten en lanzamiento de disco hasta que el joven es herido de muerte en la cabeza por aquel, por su propia torpeza o por un mal lanzamiento del dios.
Tiepolo se basó en una traducción italiana del libro hecha por Giovanni Andrea Dell'Anguillara, en la que la competición es reemplazada por un partido de tenis y la muerte sucede por un golpe de pelota, lo que explica la aparición de varias de ellas en el suelo, una raqueta y una red caída al fondo.
La obra fue encargada por el barón Whilhelm Friedrich Schaumburg-Lippe, afincado en una localidad cercana a la ciudad alemana de Wurzburgo, en la que el artista trabajaba junto a sus hijos desde 1750.
Con ella, el noble quería rendir, probablemente, homenaje a un amante suyo, un joven músico español, fallecido en 1751.
En la sala 17 de museo se encuentra junto a la obra una pequeña exposición que incluye un vídeo sobre el proceso de restauración, así como dos dibujos preparatorios de la pintura prestados por la Staatsgalerie de Stuttgart.
También se pueden contemplar fotografías de los estudios técnicos que se le realizaron al cuadro y que permite observar a través de radiografía y reflectografía los cambios que el artista realizó durante el proceso de creación así como el boceto original de la pintura.
De esta manera, se da a conocer al visitante "lo que hay detrás de la pintura misma" con estos estudios, que no suelen hacerse públicos, dado que representan fuentes de estudio que los museos albergan de sus obras, ha señalado el restaurador jefe del Thyssen, Ubaldo Sedano.
TOTALES DEL DIRECTOR DEL ÁREA DE RESTAURACIÓN DEL MUSEO THYSSEN-BORNEMISZA, UBALDO SEDANO.
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